El consejo deliberante de Villa General Belgrano aprobó por mayoría la ordenanza que determina un tope respecto de la ampliación de plazas turísticas en dicha localidad. 

El intendente Oscar Santarelli argumenta que esta propuesta responde fundamentalmente a la falta de personal para trabajar en los alojamientos ya existentes y en pos de no perjudicar el nivel de los servicios que se están ofreciendo para los turistas. 

La ordenanza determina un crecimiento anual únicamente del 2% en las plazas turísticas. Actualmente hay unas 7200 plazas habilitadas, lo que significa que para el próximo año se permitirían solo el surgimiento de unas 145 plazas.  

Al mismo tiempo, desde el oficialismo se plantea que no pueden existir más plazas turísticas que habitantes fijos en la localidad, por lo que dicha ordenanza comenzaría a regular está situación. 

La preocupación radica en el hecho de que, desde la flexibilización de las medidas durante la pandemia, se incremento rápidamente el número de plazas turísticas; por lo que se deduce que, de seguir este crecimiento, la situación alcanzará límites no recomendables. 

El concejal Ramón Graneros, de la oposición, manifestó su negativa a esta ordenanza, ya que considera que se ponen en riesgo fuentes de trabajo para el sector de la construcción. A su vez, entiende que de esta forma el personal que trabaja en hotelería no podrá disponer de diversas alternativas laborales, ya que quedarán a merced de los alojamientos ya existentes y sus modalidades de trabajo.