Cuáles son los cambios en las residencias médicas que propuso el Gobierno
El sistema de residencias médicas en Argentina se encuentra en el centro de una controversia tras la reciente...
El sistema de residencias médicas en Argentina se encuentra en el centro de una controversia tras la reciente actualización del reglamento por parte del Gobierno Nacional. La posibilidad de elegir entre dos modalidades de becas desató un debate sobre la esencia de las residencias.
Mientras el Ministerio de Salud busca “recuperar el rol formativo de la residencia”, voces dentro del sector médico, especialmente entre los residentes, expresan su preocupación por la precarización de su situación.
¿Qué cambios propuso el Gobierno para las residencias médicas?El Ministerio de Salud de la Nación introdujo la posibilidad de que los residentes elijan entre dos tipos de becas: Beca Ministerio o Beca Institución.
Beca Ministerio: Un residente de primer año cobrará aproximadamente $810.000 de bolsillo (descontando aportes jubilatorios y cobertura de obra social) de los $998.000 totales. La institución se hará cargo de la ART y el seguro de mala praxis.Beca Institución: El residente cobrará los $998.000 netos, con ART, cobertura de salud, seguro de mala praxis e incentivos adicionales que ofrezca la institución.Según el Gobierno, esta actualización “recupera el concepto de beca” al excluir “cualquier encuadre como empleo público, relación laboral o contratación de obra o servicio”.
¿Qué implica la elección entre Beca Ministerio y Beca Institución?La elección entre ambas becas implica diferentes beneficios y responsabilidades.
Quienes opten por la Beca Ministerio percibirán el monto con los descuentos correspondientes a los aportes previsionales y serán incorporados a la Obra Social de los Trabajadores del Estado Nacional. Sin embargo, no tendrán acceso a los bonos adicionales que ofrezca la institución.Quienes elijan la Beca Institución percibirán el monto sin descuentos y podrán sumar aportes o bonificaciones adicionales a criterio de la organización. La institución se hará cargo de la ART, el seguro de mala praxis y el seguro de salud.Según el Ministerio de Salud, el objetivo es “recuperar el rol formativo de la residencia, corregir las distorsiones y parches acumulados durante más de una década, y permitir que los residentes puedan elegir bajo qué modalidad realizar este tramo de su formación y cómo administrar el monto de las becas percibidas”.
Las reacciones frente a los cambiosLa actualización del reglamento generó diversas reacciones. Residentes de hospitales públicos nacionales, como el Garrahan, argumentan que la medida reduce su remuneración a un “estipendio” y desvaloriza el trabajo que realizan.
Por otro lado, la Unión Argentina de Salud (UAS), que nuclea a centros formadores del sector privado, sostiene que las residencias son “un espacio de formación acompañada por especialistas de planta” y no una relación laboral. Hugo Magonza, presidente de la UAS, afirmó que “el período de estancia en las instituciones no representa un trabajo, sino un espacio de formación acompañada por especialistas de planta”.
En diálogo con LA NACION, Hugo Magonza, presidente de la UAS considera que la etapa de residencia es un “modelo de enseñanza sistematizado, de responsabilidad progresiva y supervisado permanentemente”. En este sentido, la retribución que reciben los residentes es vista como “una ayuda para sufragar gastos de aprendizaje”.
La UAS advierte que asimilar la residencia a una relación de dependencia podría comprometer el “proceso de recambio indispensable para garantizar la formación de futuras generaciones”.
Este contenido fue producido por un equipo de LA NACION con la asistencia de la IA.