Escarmiento en las urnas
LIMA.- Los resultados de la primera vuelta de las elecciones en Chile, celebradas días atrás, fueron para la izquierda peores de lo que se esperaba. La candidata de la coalición oficialista Unid...
LIMA.- Los resultados de la primera vuelta de las elecciones en Chile, celebradas días atrás, fueron para la izquierda peores de lo que se esperaba. La candidata de la coalición oficialista Unidad por Chile y militante del Partido Comunista, Jeannette Jara, obtuvo algo más del 26% del sufragio popular, cerca de cinco puntos porcentuales menos de lo que le concedían las encuestas. Es cierto que aun así fue la postulante más votada entre todos los que competían por llegar a la presidencia del vecino país del sur, pero José Antonio Kast, el candidato del Partido Republicano, bastante conservador, cosechó más del 24% de los votos –por lo que disputará la segunda vuelta del 14 de diciembre con Jara– y, si se suma lo conseguido por los otros candidatos de derecha, Johannes Kaiser, del Partido Nacional Libertario, y Evelyn Matthei, de la coalición Chile Grande y Unido (más del 13% cada uno), se hace evidente que una mayoría de la población está disconforme con lo que ha sido la gestión declaradamente izquierdista de Gabriel Boric.
No conviene olvidar, en ese sentido, que la señora Jara fue ministra de Trabajo y Previsión Social de ese gobierno. Es decir, sus resultados relativamente magros son un castigo para una administración que se perdió en el fallido esfuerzo de imponer su visión ideológica en una nueva Constitución que, a la larga, los chilenos rechazaron mayoritariamente en un referéndum. Irónicamente, el saldo de todo ese desgaste de energía fue que la Constitución aprobada bajo Pinochet extendió su vigencia.
La paliza electoral, por otra parte, no solo se verifica en el terreno del Ejecutivo: las proyecciones realizadas a partir del recuento de votos, hasta el momento, sugieren que la derecha tendrá mayoría en las dos cámaras. La segunda vuelta, pues, se anuncia como la simple confirmación de lo que las cifras del domingo ya sugirieron claramente.
Cabe anotar, por último, que la tendencia que marcan los comicios chilenos no es un hecho aislado en la región. En la Argentina, Ecuador y Bolivia, los autoritarios regímenes de izquierda que estuvieron en el poder en las últimas décadas también han tenido un escarmiento en las urnas, y hoy en esos países se respira un aire de libertad y democracia que, esperemos, se contagie a otras naciones del continente y dure lo suficiente como para volver a encauzarlas por el camino hacia el desarrollo y la prosperidad.
Fuente: https://www.lanacion.com.ar/editoriales/escarmiento-en-las-urnas-nid22112025/