La ley firmada por JB Pritzker que impacta en las madres trabajadoras de Illinois y entra en vigor en enero
La actualización a la ...
La actualización a la Ley de Madres Lactantes en el Lugar de Trabajo en Illinois establece un nuevo marco de obligaciones para los patrones y de garantías para las empleadas. Esta modificación legal, tras la aprobación del proyecto de ley SB 0212, sustituye la noción previa de “tiempo razonable” sin compensación asegurada por una consideración laboral paga.
¿Qué establece la nueva ley que impacta en las madres trabajadoras de Illinois?La norma, que entra en vigor el 1° de enero de 2026, aplica a empresas con más de cinco personas empleadas. La disposición elimina toda posibilidad de que el empleador reduzca ingresos o condicione el uso de descansos a la utilización de licencias pagas.
De esta forma, se alinean las políticas del estado con estándares que buscan compatibilizar las obligaciones laborales con las necesidades fisiológicas de la lactancia durante el primer año de vida del hijo o hija.
Además, la ley incorpora la obligación de evaluar si la adaptación pedida por la trabajadora genera una “dificultad excesiva”, concepto tomado de la Ley de Derechos Humanos de Illinois. Solo si se demuestra esta condición, el empleador podría quedar exceptuado de conceder el tiempo remunerado.
Principales obligaciones que establece la ley para los empleadores de IllinoisLa SB 0212 define de manera explícita que los descansos para la extracción de leche deben ser pagados según el salario habitual de la trabajadora. Este punto elimina la discrecionalidad que antes existía y garantiza que el ejercicio del derecho no implique una pérdida económica.
Asimismo, la norma determina que estos descansos pueden coincidir con otros que la empresa ya ofrece. Esto permite que la organización de la jornada laboral se adapte sin duplicar pausas cuando sea posible, siempre y cuando la trabajadora pueda cumplir con sus necesidades.
La duración de este derecho se extiende durante el primer año posterior al nacimiento del hijo. La norma no establece límites en cuanto a la cantidad de pausas, indicando únicamente que deben ser “razonables” en función de la necesidad de la empleada.
Finalmente, se incluye la cláusula de “dificultad excesiva”, que actúa como excepción. Si la empresa demuestra que otorgar este tiempo pagado genera una carga significativa en términos operativos o económicos, podría solicitar quedar al margen del requisito.
Cambios necesarios en las políticas internas de las empresasLa entrada en vigor de estas obligaciones implica que los empleadores deben realizar ajustes en sus políticas laborales y sistemas administrativos. Los manuales internos deberán actualizarse para reflejar que los descansos para la lactancia ya no pueden ser descontados ni contabilizados como licencias.
Los sistemas de registro de tiempo de trabajo también requerirán modificaciones que aseguren el registro adecuado de estos descansos, para evitar errores que puedan derivar en incumplimientos de pago. De igual modo, las áreas de recursos humanos tendrán que capacitar a sus equipos y a los responsables de supervisión para manejar solicitudes y garantizar el cumplimiento de las nuevas reglas.
El proyecto SB 0212 fue impulsado por la senadora Laura Fine, junto con otros legisladores que se sumaron como copatrocinadores. En la Cámara de Representantes, la iniciativa recibió también un respaldo amplio mediante el patrocinio de más de dos docenas de miembros. Su recorrido incluyó cambios relevantes respecto de la versión inicial.
En la primera propuesta, el texto proponía un esquema concreto de 30 minutos pagados para la extracción de leche, con la posibilidad de que la trabajadora utilizara descansos pagos adicionales si requería más tiempo.
Sin embargo, la Enmienda del Comité Senatorial N.º 1 reemplazó esta estructura e introdujo el concepto que quedó plasmado en la ley final: el establecimiento de descansos remunerados sin una duración predeterminada, siempre que respondan a la necesidad de la empleada.
Esta enmienda también incorporó las prohibiciones para el empleador. A partir de la promulgación, queda restringido que se exija a las madres trabajadoras el uso de licencias remuneradas, vacaciones, días por enfermedad o cualquier otra forma, para cubrir el tiempo de extracción. Igualmente, se veta cualquier reducción salarial por este motivo.
El proceso legislativo concluyó el 1° de agosto de 2025, cuando la iniciativa se transformó en el Acto Público 104-0076, luego de que el gobernador JB Pritzker la firmara para su entrada en vigor.